Por fin me he decidido a preparar este dulce navideño tan típico en Mallorca. Mis recuerdos con elaboraciones que llevan caramelo se basan en una quemadura que solo pensarlo todavía me duele y que me mantuvo alejada de los fogones durante todas las Navidades de ese año. Aunque todavía no me he atrevido con las garrapiñadas que fueron las "culpables", el "tambor de almendras" me ha encanta, y hacía tanto tiempo que no lo probaba.
Ingredientes:
la misma cantidad de almendras que de azúcar, en mi caso:
250 gr.de almendra cruda
250 gr.de azúcar
1/2 limón
aceite para engrasar el molde
Elaboración:
- Precalentar el horno a 170º, y sobre una bandeja cubierta con una lámina de papel sulfurizado, extender las almendras, y dorarlas ligeramente. (trocear la almendra, yo la dejé toda entera)
- Con un papel de cocina empapado en aceite engrasar bien una bandeja.
- Poner el azúcar a fuego medio y calentarlo hasta que se funda, intentar no mover el cazo hasta que se transforme en un caramelo de color no muy oscuro, en este punto hay que verter las almendras y mezclarlo rápidamente con una cuchara de madera.
- Verter sobre la bandeja engrasada, extenderlo rápidamente, aplastándolo con la mitad de limón, hasta conseguir que su grosor no sea superior a 1 cm (mas o menos).
- Antes de que se endurezca del todo cortarlo con un cuchillo.
