Cuantas vueltas da la vida. En mi casa nunca se han comprado espárragos, cuando yo era niña, teníamos una casa donde pasábamos los fines de semana, y cuando era la temporada, si llegábamos con tiempo, mis padres y mi hermana íbamos a coger los espárragos que habían crecido durante la semana, y sino, mi padre se levantaba temprano (antes de que llegaran los domingueros -en el buen sentido de la palabra-) para recoger nuestro buen manojo de espárragos para la tortilla o el revuelto de la semana. Al pasar los años, tener casa propia y no pasar los fines de semana en el campo, era mi suegro, que al estar jubilado, (antes de que fueran de nuevo los domingueros), nos los traía a casa, y ahora que ya no puede ir solo, y somos nosotros los domingueros, pues a las horas que aparecemos por los matorrales, ya han pasado todos los padres y abuelos del mundo mundial a por sus espárragos trigueros para la tortilla de la temporada, no me queda otra que comprarlos cuando los veo en la plaza.
Ingredientes:
6 huevos
1/2 kg. de espárragos finos
50 gr.de queso parmesano rallado
3 cebolletas picadas
agua, aceite y sal
pimienta negra
Elaboración:
- Poner 1 litro de agua salada a hervir, mientras cortar los espárragos con las manos hasta llegar a la parte más dura, lavarlos y añadirlos al recipiente de agua hirviendo, dejándolos cocer hasta que estén casi tiernos (en mi caso 8 min.), se escurren y se reservan.
- En una sartén saltear las cebolletas tres minutos, agregando entonces los espárragos que se cuecen un minuto más.
- Aparte, se baten ligeramente los huevos con el parmesano, la albahaca, la pimienta y la sal. Echar los espárragos en la mezcla, y seguidamente verterla en una sartén con un poco de aceite bien caliente.
- Dejar cuajar la tortilla a fuego medio unos minutos por cada lado.
María.