Hace unas semanas recibí un mail de Tomeu Quely que me hizo especial ilusión, en el que invitaban a gastro bloggers y personal relacionado con la gastronomía a visitar y conocer una de las empresa mallorquinas por excelencia, Quely.
Nunca había visitado la fábrica, pero, ¿que mallorquín no conoce las quelitas?, apuesto que pocos salimos de la isla sin llevarnos una bolsa en la maleta -"por si acaso" ¿Y las galletas María?, mis recuerdos con ellas se remontan a mis desayunos de niña: -la cantidad de galletas María que podía bañar en mi tazón de leche diario.
Visitamos las instalaciones, nos mostraron los nuevos productos y los de toda la vida, su adaptación y modernización con el paso del tiempo, conocimos su historia, y sobre todo me sorprendió saber de donde viene el nombre de Quely, impuesto por la admiración del fundador de la empresa hacía la mismísima Grace Kelly, con una pequeña adaptación a la mallorquina se quedó con Quely, curioso ¿verdad?
Todos con nuestro carnet del club Quelycracks, Tomeu Quely nos propuso preparar una receta. Sin dudarlo, la primera que me vino a la memoria es lo que les gustaba preparar a mis hijas este "postre" que no le dejaban ni reposar, disfrutaban como enanas (lo que eran, jajaja) montando ellas "solas" las capas, sin ningún tipo de pretensiones, les quedaba precioso, lástima que no tenía móvil por aquel entonces, seguro que no me faltaría la foto. Para su generación en casa los recuerdos con Quely, son las Quely-meriendas, y la elaboración de esta tarta, así que no podía dejar de incluirla en el blog.
Ingredientes:
Galletas María
Chocolate para fundir
Nata para montar 250 grs.
Azúcar glass 75 grs.
Leche tíbia
Elaboración:
- Calentar en el microondas un poco de leche en una taza.
- Fundir chocolate también en el microondas.
- Montar nata, añadiéndole el azúcar glass.
- Bañar ligeramente las galletas Quely María en la leche tibía, poner la primera como base, verter una cucharada de chocolate fundido, cubrir con la nata montada, y volver a repetir la operación tantas veces como queramos, acabando con chocolate, nata montada y espolvoreando con galleta picada, fideos de chocolate...
La jornada no podía tener un final mejor, una degustación de Quely tapas, preparadas por chef Tomeu Torrens, del Celler Can Amer, creo que no me dejé ninguna por probar, todas espectaculares y exquisitas.
Gracias Quely.
María.
