Cada publicación, receta, tiene su historia, sus recuerdos..., ésta me trae muy buenos recuerdos del viaje que hicimos hace dos años los cuatro a los mercadillos navideños de Colonia, fue un viaje improvisado, montado casi en el último momento (cuando los hijos son mayores coincidir con vacaciones o días libres todos es complejo, aunque siempre intentamos amoldarnos para hacer pequeñas escapadas en familia).
Cada vez que preparo este Glühwein, vino caliente especiado, el olor que impregna toda la casa nos transporta directamente a los pies de la Catedral de Colonia, está rico, rico, pero desde entonces cuando llega el frío lo preparo en casa, se mantiene varios días en la nevera, y sienta de bien una copia cuando llegas de trabajar con el frío en el cuerpo.
Cada año tienen tazas diferentes, y cada Mercadillo tiene su taza conmemorativa, al tomar tu vino, pagas un pequeño extra y te quedas con la taza, así que, como podéis ver, me vine con unas cuantas tazas, cada una diferente.
Ingredientes:
1 l. de vino tinto
100 gr. de azúcar moreno
2 ramas de canela
2 estrellas de anís
4 clavos de olor
la piel de un limón
Elaboración:
- Poner en un cazo 1/4 del vino con el azúcar, las ramas de canela, las estrellas de anís, los clavos de olor y la piel de limón.
- Remover hasta que se disuelva el azúcar, añadir el resto de vino y calentar 10 minutos.
- Colar, servir muy caliente y si sobra reservamos en la nevera
Elaboración en la Thermomix:
- Poner en el vaso el azúcar, la canela, las estrellas de anís, los clavos y la piel de limón, programando 5 minutos 100º, velocidad 1.
- Añadir el resto del vino y programar 7 minutos, 80º, velocidad 1.
- Colar, servir muy caliente y si sobra reservamos en la nevera.
Las fotos las hice en mi cocina, y nieve, lo que se dice nieve, no había, ni dentro, ni fuera de ella, ya os imagináis que es de mentirijillas, vi unas fotos parecidas en Pinterest y me encanto el montaje, pero fuera de ese truco el vino lo disfrutamos recordando.